La junta de accesibilidad de Mislata abordará el 30 de mayo el asunto del edificio de nueva construcción situado en la confluencia de la calle Ramón y Cajal con Doctor Peset que incumple la normativa autonómica de accesibilidad, tal y como han señalado desde la Coordinadora de Disminuidos Físicos de Valencia (CODIFIVA). Aunque la Ordenanza de accesibilidad del Ayuntamiento de Mislata no es aplicable a los edificios de vivienda, no es cierto que su aplicación sólo afecte a aquellos edificios de pública concurrencia o locales comerciales que superen los 150 metros cuadrados, ya que deben aplicarse las disposiciones reglamentarias de desarrollo de la ley 1/1998 de accesibilidad que obliga a cumplir con determinados parámetros.
Asimismo, el decreto 38/2004 de 5 marzo de la Generalitat Valenciana alude ¿al desarrollo de la Ley de Ordenación de la edificación (¿) con objeto de mantener la unidad normativa y la coherencia de la Orden de 22 de abril de 1991 en la regulación de diseño de edificios de vivienda?.
En el mismo informe, CODIFIVA explica que la ley de accesibilidad exige que los edificios comprendidos entre los 7 y 12 metros, como es el caso del edificio que se está levantando en Mislata, cumplan con un nivel de accesibilidad ¿convertible?, es decir, que mediante modificaciones posteriores que no afecten a su configuración esencial, pueda transformarse como mínimo en practicable?.
La cuestión es, por tanto, si el edificio de nueva planta en construcción que es objeto de este análisis es susceptible de convertirse en el futuro en practicable para personas con movilidad reducida.
¿La respuesta es sencilla si solo nos fijamos de la apreciación ocular y esta sólo puede ser negativa porque, ni siquiera, con los más que dudosos mecanismos mecánicos colmaría esa exigencia?, añade el mismo informe.
En referencia al itinerario practicable desde la plaza de aparcamiento al ascensor, esta propuesta ¿no merecería apreciarse si no fuera porque ha sido dado en un Informe técnico, un documento que parece olvidar que la accesibilidad es una cuestión de derechos elementales de las personas encuadrado nominalmente en la Ley 51/2003 de Igualdad de Oportunidades en la que la vulneración de su normativa es sancionable por conducta discriminatoria?.
De hecho, esta solución que se apunta es del todo recurrible por vulneración de derechos fundamentales, según CODIFIVA, quien ha recordado que las personas con movilidad reducida no son sólo las personas que van en una silla de ruedas sino que cualquier persona en un momento dado puede estar afectado, ¿piénsese en las mujeres embarazadas, ancianos, personas que empujan un carro de bebé e, incluso, aquellas que tuvieran que subir un carro lleno de compra por siete u ocho escalones para acceder a un edificio?.
En el edificio de la polémica en Mislata, son 11 los escalones que separan la puerta de entrada al patio hacia el ascensor, según fuentes de la asociación de vecinos de El Quint.
[Fuente: www.hortanoticias.com]