Doctor Honoris Causa por la Universitat Politècnica de València. Investido el 24 de mayo de 2010
Honorable Sra. Consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación;
Rector Magnífico de la Universitat de València;
Rector Magnífico de la Universitat Jaume I de Castelló;
Excmo. Sr. Presidente del Consejo Social de la Universidad Politécnica de Valencia;
Doctor Ferran Adrià;
Doctor Francisco Torreblanca;
Sra. Vicepresidenta de la Diputación de Alicante;
Sr. Alcalde de Alcoy;
Sra. Alcaldesa de Villena
Autoridades
Claustro de Doctores
Miembros de la Comunidad Universitaria
Familiares y amigos
Señoras y señores.
En primer lugar quiero leerles públicamente el mensaje que el Jefe de la Casa de Su Majestad El Rey nos ha hecho llegar y que cito textualmente:
Nuestro agradecimiento a todos por su presencia en este Acto de Clausura del Curso Académico 2009-2010 de la Universidad Politécnica de Valencia. En él investimos dos nuevos Doctores por "Causa de Honor", los Señores Ferran Adrià y Francisco Torreblanca. Reconocimiento a dos personas, a dos personalidades, extraordinariamente representativas de esa apasionante disciplina que es la Alta Cocina. Como muchos de ustedes saben, este sofisticado y tecnificado saber, incursiona con decisión, más allá de los límites fronterizos de territorios diferenciados como el Arte, la Ciencia y la Técnica. Esta propuesta de nombramiento fue realizada por el Departamento de Tecnología de los Alimentos y posteriormente aprobada por unanimidad en nuestro Consejo de Gobierno.
Debo felicitar a los nuevos Doctores "Honoris Causa" y agradecer su aceptación de este Doctorado, con él nuestra Universidad continúa engrosando su distinguida lista de Honoris. Y lo hace en un ámbito escasamente representado en este nivel honorífico y académico. Sin embargo, nos encontramos con una disciplina estrechamente vinculada con algunos de los estudios que se cursan en nuestras aulas, y sobre todo, con la investigación y la transferencia realizada en distintos departamentos e instituciones. Especialmente con los relacionados con la ciencia de los alimentos. La dos estupendas laudatio de los profesores, D. Jaume Coll y D. Javier Martínez, han puesto de manifiesto los sobrados merecimientos que les hace acreedores de esta distinción a D. Ferran Adrià y D. Francisco Torreblanca.
Nuestros nuevos hermanos Doctores son maestros en una disciplina que nos invita a reflexionar sobre nuestra forma de alimentarnos, un acto crucial de nuestras vidas que realizamos entre tres y cinco veces al día, y sobre nuestra forma de entendernos, de respetarnos y de vivir dignamente, en armonía con nuestro cuerpo, nuestra cultura y nuestro espíritu. Y su propuesta se produce de la única manera que es posible mantener vivo lo más preciado, reflexionando sobre el pasado, respetándolo, profundizando en su comprensión y proponiendo una transformación innovadora del mismo.
Tienen la sociedad, la economía y la universidad españolas mucho que aprender y valorar del trabajo de nuestros mejores cocineros de lo salado y lo dulce (y de todo el resto del universo de sabores), ellos han sido capaces de avanzar, partiendo de los más autentico de nuestra tradición culinaria, y proponer un nuevo paradigma a la vez brillante y riguroso, y lo han hecho con tal cantidad de esfuerzo, tesón y lucidez, que han ocupado la vanguardia mundial. Ha sido una lección memorable, y nos marca el camino que debemos seguir el resto de la sociedad española, entendiendo que esto es el fruto de un trabajo que viene de lejos, y que les ha permitido (a ellos sí) situar a muchos restaurantes españoles entre los primeros diez, veinte o cien primeros del ranking mundial. Lo dicho, un ejemplo para muchos digno de analizar, diseccionar, estudiar, evaluar... e intentar emular.
Adicionalmente, la explosión culinaria española de las últimas dos décadas -con todas sus variantes territoriales ¡que magnifica riqueza, cuanta cultura viva!- ha sido un factor determinante de creación de valor en nuestro sector turístico, captando visitantes de alto nivel adquisitivo y de calidad cultural, haciendo realidad la cadena de conocimiento y valor. ¡Un verdadero lujo y una lección magistral! Adrià y Torreblanca, son dos ejemplos excelentes de este camino recorrido, y lo que es más estimulante, se proponen seguir abriendo nuevos caminos en el futuro inmediato.
D. Ferran Adrià ha sido considerado como el mejor cocinero del mundo en varias ocasiones por los medios especializados. Desde su reconocido restaurante "El Bullí", se ha convertido en faro-guía de la alta cocina española. Sin duda hoy, gracias a él y a un bueno número de distinguidos colegas suyos, es la española una de las mejores cocinas del mundo, si no la mejor. Ferran Adrià manifiesta un claro espíritu universitario en su hacer cotidiano, enseña, investiga y difunde su conocimiento. Y con ello contribuye a nuestro enriquecimiento y placer en algo que claramente forma parte de nuestro patrimonio cultural como pueblo.
D. Francisco Torreblanca, es también, un maestro, en este caso, de la alta repostería, de la que se ha convertido en todo un referente internacional, reconociéndose como el mejor en este dulce y apetitoso arte de la repostería.
También desde sus instalaciones en Elda, desde donde desarrolla su magistral quehacer, investiga, innova y nos permite avanzar en el conocimiento de la elaboración de postres a cada cual más exquisito. Como Ferran Adrià, quiere difundir su conocimiento con una extensa obra publicada, que hoy es de consulta obligada para conocer los avances sobre la elaboración de estos deliciosos manjares.
Alcanzando un escalón superior, su trabajo diario nos ofrece, a través de la aplicación de sus conocimientos, sus investigaciones y sus enseñanzas, nuevos estímulos: emoción, sensibilidad, sensualidad, sorpresa, alegría, humor, y admiración de la perfección del arte. Valores -en suma- que nos humanizan y nos acercan a lo mejor de nosotros mismos.
De nuevo gracias a los dos, pues con ellos la Universidad Politécnica de Valencia, como ya hicieran otras universidades, incorpora, nunca mejor dicho, con todos los honores, el mundo de la Alta Cocina.
También en este acto, como venimos haciendo habitualmente, hemos investido a los nuevos Doctores. Sea extensiva nuestra sincera felicitación a todos ellos, junto a sus familiares y amigos que les acompañan en este emocionante día. Obtener el mayor nivel académico que se otorga en el sistema universitario constituye un paso crucial en la vida de todo universitario. Les animamos a continuar en ese camino de esfuerzo y dedicación, de la misma manera que les solicitamos continúen profundizando y ampliando su conocimiento en los temas objeto de sus respectivas investigaciones. Su trabajo es capital para el desarrollo científico de una Universidad como la nuestra, que pretende consolidarse entre las mejores por su producción científica.
Irremediablemente en la vida, no todo son alegrías, también hay ocasiones para las penas. Así desgraciadamente nos sorprendió la triste noticia del fallecimiento, hace unas semanas, del profesor José Luís Guardiola, quien fuera director de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos y durante años director del departamento de Biología Vegetal y miembro de nuestro Consejo de Gobierno. Desde aquí y en nombre de toda la comunidad universitaria, quiero manifestar nuestro más sentido afecto para con sus familiares.
Del mismo modo hace unos días conocimos todos la lamentablemente pérdida de nuestro Doctor Honoris Causa y escritor universal D. José Saramago, cuyo acto de investidura como D.H.C. siempre recordaremos. A sus familiares, amigos y Fundación, también les trasladamos el profundo pésame de esta Comunidad.
Llegado este punto y teniendo que hacer un breve resumen de lo que ha sido este curso académico, podemos decir que ha estado marcado por tres hechos fundamentales.
En primer lugar por la culminación de los trabajos de adaptación de todos nuestros estudios a la nueva estructura curricular de grados y másteres oficiales, que permitirá que este próximo curso académico, toda nuestra oferta académica se corresponda con la nueva estructura del llamado Espacio Europeo de Educación Superior. Desde aquí, no puedo dejar de testimoniar nuestro agradecimiento a todas las Comisiones de Planes de Estudio de nuestros Centros, así como a todo el equipo del Vicerrectorado de Estudios y Convergencia Europea, por el intenso trabajo y el puntual seguimiento desarrollado en este complicado asunto.
También debo destacar el esfuerzo de la Comunidad Universitaria por entender, apoyar y desarrollar, en lo que sin duda ha demostrado ser todo un ejercicio de responsabilidad institucional, la adecuación acometida de nuestra oferta curricular a las demandas sociales. Todos hemos interiorizado en la medida de nuestras responsabilidades, que una Institución Académica que pretende ser eficiente y prestar el mejor servicio a la sociedad, especialmente en las actuales circunstancias, debe hacer este esfuerzo de racionalización, aún cuando ello suponga en algunos casos, suprimir titulaciones escasamente demandadas.
El tercer y último hecho que quiero subrayar, ha sido la reformulación de la propuesta de Campus de Excelencia Internacional, que junto a la Universidad de Valencia y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas hemos preparado para la convocatoria de este año.
Las tres instituciones participantes, hemos querido atender plenamente todas y cada una de la observaciones que por parte de la administración, se nos hicieron. Este nuevo proyecto que hemos presentado, lleva por nombre "VLC-CAMPUS DE EXCELENCIA INTERNACIONAL" y conviene decirlo, conforma una de las tres mayores agregaciones de producción científica, transferencia e innovación de todo el Estado. Otro tanto podríamos decir de su incuestionable proyección internacional.
En su conjunto, VLC-Campus de Excelencia Internacional nos sitúa como líderes nacionales en muchos de los indicadores que habitualmente se utilizan para la medición de estos puntos. Es una propuesta sólida, meditada, bien elaborada y que sin duda pone en mayor valor el potencial de nuestras respectivas instituciones para continuar mejorando y avanzando en el progreso científico y tecnológico de nuestra comunidad. Es por ello que no cabe más que esperar la definitiva aprobación de este proyecto como Campus de Excelencia Internacional.
Es nuestro deseo que la Comunitat Valenciana, con uno de los mejores entornos universitarios y científicos del país, cuente en el futuro con varios Campus de Excelencia Internacional.
Agradecemos desde aquí el apoyo de todas las instituciones que han querido mostrar su respaldo a esta propuesta. En especial al Gobierno Valenciano y a todas las fuerzas políticas, tanto de las Cortes Valencianas como del Pleno del Ayuntamiento de la Ciudad de Valencia, que han querido sumarse de nuevo a esta propuesta del Campus de Excelencia Internacional. Tan manifiesto ha sido su apoyo unánime que todas las instituciones integrantes de este CEI hemos querido ostentar el nombre de nuestra ciudad "Valencia" en el mismo nombre del proyecto.
Por último e inevitablemente, nos hemos de referir al preocupante momento económico que nos toca vivir con una crisis verdaderamente severa que afecta a todas las instituciones y agentes sociales y ante la que no podemos permanecer impasibles. Las Universidades españolas nos vemos obligadas a esforzarnos en un ejercicio de austeridad presupuestaria y tenemos que agradecer la comprensión de nuestra Comunidad Universitaria y de las estructuras de Gobierno en la siempre difícil e ingrata tarea de ajuste presupuestario.
Es en este momento de restricción cuando más se nos pide y cuando más debemos dar. Estamos seguros que con el tesón y la entrega de todos los que formamos esta Comunidad Universitaria, podremos aportar todo lo que se espera de nosotros, y de nuestra imprescindible contribución para retomar la senda del crecimiento económico, la generación de empleo y el cambio de nuestro modelo productivo.
En este punto debo destacar y reconocer el trabajo de esta Comunidad Universitaria, que pese a las dificultades que padece nuestra economía, ha logrado con su esfuerzo y dedicación incrementar la cifra de derechos reconocidos en I+D, que el pasado año 2009 crecieron un 8,8%, cifra sin duda más que reseñable en estos tiempos y que continúa consolidándonos en el liderazgo en transferencia tecnológica de todo el sistema universitario español.
Tenemos la intención de promover acciones tendentes a impulsar, aún más, la generación de conocimiento y la transferencia, porque somos conscientes de que debemos ser aún más activos en la creación de riqueza y bienestar. Lo que a buen seguro redundará en un mayor nivel de empleo y una mejor calidad de vida en nuestro entorno próximo.
La Universitat Politècnica de València es reafirma en el seu compromís de servei a la societat des de la millora dels serveis de formació cada vegada més ajustats a les noves demandes socials, la major generació de coneixement científic i tecnològic. En definitiva, una universitat compromesa activament amb la posada en valor del coneixement i la difusió de la cultura de valors. Valors com són la solidaritat, la sostenibilitat i la competitivitat.
Moltes gràcies a tots.